Actualización de agosto de 2020 desde Honduras
Saludos hermanos,
En medio de la Pandemia agradecemos a Dios porque a través de la generosidad de nuestros benefactores hemos podido sostener dos comedores solidarios en dos colonias con gran población y pobreza extrema. Con estas dos iniciativas hemos repartido más de 4,000 platos de comida durante estos cinco meses a niños y ancianos en medio de una crisis social por la falta de medios económicos de las familias por el aislamiento, la pérdida de los empleos y las fuentes de ingresos. Durante estos cinco meses hemos entregado más de 150 libras de leche en polvo a niños de bajo peso, este programa lo hemos iniciado este año con el apoyo de nuestros benefactores y el fruto de dos dispensarios médicos que gracias al apoyo de nuestros líderes y las alianzas con un programa de la Pastoral de la salud fundada por un sacerdote español diocesano ha traído grandes beneficios a nuestras comunidades con tanta necesidad.
En medio de la crisis hemos apoyado a una madre sola con 4 hijos pequeños, víctima de maltrato de su pareja y que gracias a nuestro acompañamiento pudo hacer un cambio en su vida, liberándose del maltrato buscando un mejor futuro para ella y sus hijos, ella es un testimonio de nuestro servicio como Siervos Misioneros de la Santísima Trinidad en nuestras misiones y las bendiciones de nuestros benefactores que confían en nuestra administración para ayudar a nuestros hermanos con mayor necesidad.